La rosácea es una afección cutánea continua (crónica) que causa enrojecimiento, granos, vasos sanguÃneos rotos y, en casos graves, deformación en la nariz. Las zonas que más suele afectar son la cara y los ojos. En algunos casos, también puede afectar el cuello, el pecho u otras zonas de la piel. El enrojecimiento puede volverse de largo plazo (permanente) a medida que los vasos sanguÃneos pequeños de la cara se ensanchan (se dilatan). Pueden aparecer elevaciones pequeñas, rojizas y llenas de pus (pústulas),
que tienen una apariencia parecida al acné de adulto. Pero no está relacionada a los factores que causan el acné.
La rosácea se manifiesta con brotes que aparecen y desaparecen de varias semanas a varios meses. Si no es tratada, la rosácea tiende a empeorar con el tiempo. Los siguientes factores pueden empeorar la afección:
Sol
Calor
Comidas picantes
Beber alcohol
Rubor (enrojecimiento de la cara)
Actividad fÃsica
·¡²õ³Ù°ùé²õ, especialmente ira o vergüenza
Bebidas calientes
Irritación por productos para el cuidado de la piel
Ciertos medicamentos
Los investigadores desconocen las causas de la rosácea. Ciertos factores pueden aumentar las probabilidades de que usted tenga rosácea. Entre ellos:
Antecedentes familiares de rosácea
Reacción de la piel a los ácaros de los folÃculos capilares o a bacterias de la piel
Respuesta anormal de su sistema inmunitario
Trastorno de los vasos sanguÃneos que aumenta el flujo sanguÃneo en la piel de la cara
Algunos medicamentos
Usted corre un mayor riesgo en las siguientes situaciones:
Tiene entre 30 y 60 años.
Tiene origen escandinavo o céltico
Tiene piel clara
Es mujer en la menopausia
Es una persona que se ruboriza con facilidad
Los sÃntomas de la rosácea varÃan de una persona a otra. Suelen comenzar con un fácil rubor o enrojecimiento en la piel de la cara. Luego, el enrojecimiento se vuelve duradero alrededor de la nariz. Con el tiempo, el área de enrojecimiento se extiende hacia el resto de la cara.
Estos son los sÃntomas principales:
Rubor. El rubor (o enrojecimiento de la cara) ocurre con frecuencia y permanece por un tiempo. Las áreas afectadas son las mejillas, la barbilla, la frente, la nariz y el cuello. El rubor puede aparecer y desaparecer, y hay desencadenantes que lo empeoran.
Enrojecimiento a largo plazo (crónico). El enrojecimiento de la cara que no desaparece es el signo más común de la rosácea, y tiene el aspecto de una quemadura solar.
Vasos sanguÃneos que se pueden ver. Se forman vasos sanguÃneos dilatados (telangiectasia) debajo de la piel de la cara, especialmente en las mejillas, que pueden formar una red. Este tipo es frecuente en las mujeres.
Bultos en la piel (pápulas y pústulas). Estos son bultos rojos y duros, o bien granos más blandos llenos de lÃquido, que pueden verse como acné. Tienden a ocurrir arriba de la nariz, en las mejillas y en la barbilla. Los granos pueden aparecer y desaparecer.
Engrosamiento de la piel (rosácea fimatosa). La piel se engrosa y genera un tejido cutáneo adicional. La zona que más suele afectar es la nariz, lo que provoca que se agrande y se vuelva protuberante (rinofima). También puede ocurrir en la frente, la barbilla y las mejillas. Esto ocurre con mayor frecuencia en hombres.
Irritación de los ojos. La rosácea también afecta los ojos y los párpados. Los sÃntomas en los ojos incluyen enrojecimiento, ardor, lagrimeo, inflamación en los párpados y sensación de que tiene suciedad o arenilla en los ojos. Los sÃntomas pueden empeorar o mejorar de un dÃa a otro.
También pueden aparecer otros sÃntomas, como los siguientes:
Ardor o sensación punzante. Puede sentir ardor o una sensación punzante en la cara. También puede sentir picazón, pero no suele producirse con tanta frecuencia.
Edema (hinchazón). La cara puede inflamarse junto con otros sÃntomas de la rosácea.
Piel reseca. La piel del centro de la cara puede resecarse, volverse áspera y escamarse.
Los sÃntomas de la rosácea pueden ser los mismos que los de otras afecciones. Consulte siempre a su proveedor de atención médica para obtener un diagnóstico.
Su proveedor de atención médica le preguntará por los sÃntomas y antecedentes médicos. También le preguntará sobre los antecedentes médicos de su familia. Le hará una exploración fÃsica que incluirá observar minuciosamente la piel y los ojos. No existen estudios que puedan confirmar un diagnóstico de rosácea.
La rosácea no se puede curar, pero el tratamiento puede ayudar a aliviar los sÃntomas. El tratamiento dependerá de los sÃntomas, la edad y el estado de salud general. También dependerá de la gravedad de la afección. El tratamiento puede incluir lo que se detalla a continuación:
Cambios en lo que come y bebe, como no consumir cafeÃna, comidas picantes ni alcohol
Medicamentos antibióticos que se administran por boca (vÃa oral) o que se colocan en la piel (tópicos)
Cremas, enjuagues o lociones recetadas Con frecuencia, se usan cremas con metronidazol, ácido azelaico, sulfacetamida sódica e ivermectina. Nuevas cremas, como la brimonidina y la oximetazolina, disminuyen el enrojecimiento al estrechar temporalmente los vasos sanguÃneos.
Exfoliaciones con ácido glicólico
Gotas para los ojos recetadas
Tratamiento láser o electrocirugÃa para contraer los vasos sanguÃneos
CirugÃa o raspado (dermoabrasión) para tratar la formación de cicatrices en la nariz
Los sÃntomas de la rosácea generalmente mejoran con medicamentos. Sin embargo, tienden a empeorar de nuevo si se dejan de tomar los medicamentos. Si los sÃntomas persisten o empeoran, infórmese sobre otras opciones de tratamiento, incluso combinaciones de tratamientos. No use tratamientos de venta libre a menos que se lo indique el proveedor de atención médica. Algunos de estos tratamientos pueden empeorar la rosácea.
Consulte con sus proveedores de atención médica sobre los riesgos, los beneficios y los efectos secundarios posibles de todos los tratamientos.
Algunos hombres con una forma más severa de rosácea desarrollan rinofima. En este trastorno, las glándulas sebáceas en la piel de la nariz se obstruyen y aumenta el tamaño de la nariz. Esta se agranda y puede volverse protuberante y roja. Al mismo tiempo, se hinchan las mejillas. El alcohol puede empeorar el rubor, pero el consumo de alcohol no es la causa de esta afección. La rosácea ocular puede causar problemas en los ojos, como una úlcera corneal.
Los investigadores no saben cómo prevenir la rosácea, aparte de evitar sus desencadenantes.
La rosácea es una afección crónica, pero puede manejarla con algunos cuidados personales.
Conozca cuáles son sus desencadenantes; por ejemplo:
Bebidas calientes
Comidas picantes
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Bebidas alcohólicas
Actividad fÃsica
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Sol
Clima extremadamente frÃo o extremadamente caliente
Para manejar los sÃntomas:
Evite los desencadenantes.
Tome sus medicamentos como se lo indicaron.
Lávese la cara dos veces al dÃa con un limpiador facial suave. Enjuague bien la piel con agua tibia (no caliente). Séquela dando golpes suaves con una toalla de algodón.
No use esponjas, cepillos, esponjas vegetales u otros objetos ásperos.
No use exfoliantes ni astringentes.
Si se afeita la cara, use una afeitadora eléctrica.
AplÃquese diariamente filtro solar con factor de protección solar 15 o más alto. El sol puede empeorar los sÃntomas de la rosácea.
Elija cosméticos y productos para el cuidado de la piel que no irriten la piel, que no sean oleosos ni tengan perfume.
No aplique cremas con esteroides en las lesiones de la piel, porque pueden empeorar la rosácea.
Llame al proveedor de atención médica si tiene cualquiera de los siguientes sÃntomas:
SÃntomas que empeoran o no mejoran con los medicamentos
Enrojecimiento, ardor o irritación en los ojos
Otros sÃntomas nuevos
La rosácea es una afección cutánea continua (crónica) que causa enrojecimiento, granos y vasos sanguÃneos rotos.
Las zonas que más suele afectar son la cara y los ojos. En algunos casos, también puede afectar el cuello, el pecho u otras zonas de la piel.
La rosácea se manifiesta con brotes que aparecen y desaparecen de varias semanas a varios meses. Si no es tratada, la rosácea tiende a empeorar con el tiempo.
El calor, los alimentos picantes, el alcohol y otros desencadenantes pueden empeorar la afección.
La rosácea no se puede curar, pero el tratamiento puede ayudar a disminuir los sÃntomas.
Puede manejarla con algunos cuidados personales. Conozca cuáles son sus desencadenantes y tome medidas para tratar suavemente su piel.
Consejos para ayudarlo a aprovechar al máximo la visita con su proveedor de atención médica:
Tenga en claro la razón de la visita médica y qué quiere que suceda.
Antes de la visita, anote las preguntas que quiere hacer.
Lleve a un acompañante para que lo ayude a formular las preguntas y a recordar qué le dice su proveedor.
En la visita, anote el nombre de los nuevos diagnósticos y de todo nuevo medicamento, tratamiento o prueba. También anote las instrucciones que el proveedor le indique.
Sepa por qué se receta un tratamiento o un medicamento, y cómo lo ayudará. Conozca los efectos secundarios.
Pregunte si su afección se puede tratar de otra forma.
Sepa por qué se recomienda una prueba o un procedimiento y qué podrÃan significar los resultados.
Sepa qué esperar si no toma el medicamento o no se realiza la prueba o el procedimiento.
Si tiene una visita de control, anote la fecha, la hora y el objetivo de esta.
Sepa cómo comunicarse con su proveedor si tiene preguntas.
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